Si quieres hacer que tus días de descanso sean momentos aún más memorables, incluye algunas de estas actividades, te aseguramos que harán de estas fechas las mejores.
Actividades que debes hacer durante las vacaciones
- Prueba un nuevo sabor de helado.
- Compra una postal, escríbela y envíala a tu mejor amigo.
- Haz un picnic en la sala de tu casa, invita a tres personas.
- Descubre un nuevo lugar en tu ciudad.
- Escribe un diario de las vacaciones, que incluya fotos y recuerdos (una flor, una piedra, una servilleta, etc.)
- Hornea cupcakes para regalarlos a tus familiares.
- Apréndete la coreografía de una canción.
- Hazte un tatuaje temporal.
- Por un día aléjate de las redes sociales.
- Siéntate en la banca de un parque y dibuja lo que ves.
- Pasa el día disfrutando, exclusivamente, de tu compañía.
- Recicla algo usando un tutorial de DIY (Do It Yourself).
- Dedícale un día entero a tus padres o tus abuelos.
- Cada día de vacaciones tómate una selfie e imprime la que más te gusten.
- Recuerda esos momentos que te hicieron feliz en el trabajo, escríbelos en un cartel y ponlos donde puedas verlos fácilmente.
- Convierte tu casa en un spa, no olvides consentir a tus pies.
- Invita a tus amigos a una sesión de juegos de mesa.
- Durante todo un día no hagas absolutamente nada.
- Aprende cómo hacer una o dos figuras en origami, procura que no sean un barco ni un avión.
- Busca en Pinterest el diseño de una pulsera y cópiala.
- Ve a un karaoke u organiza uno en casa.
- Lee de nuevo el libro que te gustaba en tu infancia.
- Visita el edificio más alto de tu ciudad (o del lugar que estás visitando) y tómate una foto allí. Imprímela y, al respaldo, escribe los sueños que quieres alcanzar.
- Juega con burbujas de jabón y piensa que cuando se rompen, es un sentimiento negativo que dejas ir.
- Crea tu cápsula del tiempo que abrirás en tus próximas vacaciones. Incluye una carta donde escribas cómo te sientes.
En vacaciones, algo de aburrimiento es sano para los niños
Al igual que los adultos, los más pequeños de la casa necesitan tiempo para desconectarse de todo y de todos (en especial de las pantallas). Salir de paseo, hacer un curso de vacaciones o pasar unos días donde los abuelos, son actividades que disfrutarán en grande, pero un error común que cometen los padres, tratando de que los días de descanso de sus hijos sean los mejores, es programarles un exceso de actividades. Los momentos de ocio, de no hacer absolutamente nada, incluso de aburrimiento, son muy enriquecedores para los niños pues al tratar de resolver qué hacer, están desarrollando habilidades como creatividad, confianza, tolerancia y aprenden a darle un adecuado manejo a las frustraciones, a las emociones y a la resolución de los problemas. Así que déjalo (claro siempre bajo supervisión a una distancia prudente) explorar solo el mundo que lo rodea, y aunque creas que debes guiarlo o darle miles de indicaciones, no intervengas a no ser que su seguridad esté en riesgo o tu hijo te pida ayuda, en ese caso interviene durante unos 5 minutos y luego permítele seguir solo.
Algunas ideas para motivarlo a aprender a manejar su tiempo libre y para que vaya descubriendo qué le gusta hacer, son:
– Haz que juegue con niños de su misma edad. Invita uno o máximo dos pequeños a tu casa y déjalos jugar a lo que prefieran, mientras tú observas a una distancia prudente.
– Proporciónale herramientas. Dale ropa para que se disfrace, colores (plumones, tizas, acuarelas) para que pinte o ponle música, dale un tambor o una pandereta, a los niños les gusta seguir el ritmo golpeando algo.
– Cuéntale cómo te divertías cuando eras niño y estabas aburrido. Los tiempos han cambiado eso es cierto, pero las actividades que hacían le pueden servir de inspiración a tus hijos.
– Convéncete de que el aburrimiento es positivo. Con esto te queremos decir que la próxima vez que escuches la frase: “Mamá, estoy aburrido”, no corras a buscar una actividad para entretenerlo, en su lugar motívalo a que descubra qué puede hacer con su tiempo.
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